martes, 23 de octubre de 2007

Pequeñas anécdotas sobre el cumpleaños de García

Como muchos sabrán, el músico Charly García cumplió 56 años este martes 23 de octubre, y lo festejó como siempre: brindó un show para amigos y fans.

Seguramente habrán leído la nota en varios medios nacionales. La gran mayoría utilizó el cable que publicó la agencia de noticias Télam. Por lo tanto, todas las notas fueron prácticamente iguales: Charly llegó en su limusina, tomó champagne en el escenario con sus amigos, y tocó para sus fans. Detalles más, detalles menos, en prácticamente ninguna de estas notas se pudo saber de qué se trató el show. ¿Sabían que tocó dos horas? ¿Sabían que el gran invitado de la noche fue Pedro Aznar?. Tal vez sí, tal vez no, así que de esto nos vamos a ocupar en estas líneas.
De muy buen humor llegó a The Roxy pasadas las 23 horas y el telón se abrió a las 24. Al igual que los shows en La Trastienda, Charly arrancó su show, acompañado como siempre por su banda, tocando temas de su nuevo y todavía postergado disco “Kill gil”. El comienzo fue con una versión con el teclado del Himno Nacional Argentino y luego arremetió con toda la fuerza de “No importa”, y siguió con “Los fantasmas existen” y “Un corazón para colgar”, entre otras. En medio de los temas de “Kill gil”, hubo un amague para “Cerca de la revolución”, pero fue sólo durante un minuto, para luego volver al nuevo disco. “Break it up”, “Telepáticamente” y “Watching the wheels”, el cover de John Lennon, también fueron parte de la partida. Fin de la primera parte.
Para la segunda parte del show vendría la lista de clásicos que todos los “aliados” de Say no more esperan, como “Demoliendo hoteles”, “Anhedonia” o “Adela en el carrousel”. Algunas fueron solamente fragmentos muy cortos, como por ejemplo “Desarma y sangra”, o “Chipi chipi”. Pero algunas obras inmortales como “Promesa sobre el bidet” o “Instituciones”, en su versión más rockera, hicieron temblar el piso del Roxy. El clima festivo arriba y abajo del escenario era tremendo. García iba del teclado a la guitarra y de la guitarra al piso. Su buen humor perduró durante las dos horas que duró el show. Sonó con todo “No me dejan salir”, una joya que Charly recuperó en su repertorio hace muy poco tiempo. Se retiró nuevamente del escenario. Pero todavía faltaba el plato fuerte.
A los pocos minutos el telón se abrió y, tocando el bajo como nadie más lo sabe hacer, apareció el gran invitado de la noche: Pedro Aznar. Este músico, que formó parte junto a García de una de las bandas más importantes del rock argentino, Serú Girán, fue ovacionado enormemente por todos los presentes. Fueron cinco los temas que tocaron juntos. Tres de ellos son del disco “Tango”, que grabaron en conjunto a mediados de los años 80: “Pasajera en trance”, “Angeles y predicadores” y “Hablando a tu corazón”, momento muy emotivo, con toda la gente saltando y coreando el estribillo con todas las ganas. Es que era un momento único y se sentía en el ambiente. ¿Para el final? Nada más ni nada menos que dos perlitas de Serú: “Perro andaluz” y “Mientras miro las nuevas olas”. Impecable. Imperdible. No es cosa de todos los días tener a estos dos monstruos de nuestro rock reviviendo estos temas que ya son parte de la historia del rock argentino. Que los cumplas feliz, García. Say no more.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

muy bueno vaughan. te felicito

Anónimo dijo...

Parece que estuvo tremendo, Woody (no voy a revelar tu identidad). Charly es impredecible, puede abandonar un escenario antes de comenzar o ser el músico mas creativo de la música nacional. Sobre la cobertura de la prensa, ya nos tiene acostumbrados a los lugares comunes (la limusina, el sofá, etc.) que todos ya conocemos.
Felicitaciones con el blog, ¡que sea rock!

Juliana Maestrojuan dijo...

Muy linda la nota, fer. Siempre con último en lo que respecta a espectáculos. Me mantenés al tanto de todo. Besos, pasen por www.elpeliculario.blogspot.com
Besos